Pre-viaje

El viaje realmente empezo desde el 1ro de Agosto. El 31 de julio fué mi último día de trabajo, el miercoles primero de Agosto fue la última salida de antro en Monterrey, fue en la Havana y el día siguiente fue la última cena en mi restaurante favorito: Sierra Madre; con mis amigos más cercanos y esa misma noche salí rumbo Aguascalientes.

En Aguascalientes fue cuando realmente pude mandar toda mi papelería a suecia, la envié con solo un mes de anticipación del primer día de clases, realmente creí que no iba a alcanzar a ser admitido por la universidad y que el primer intento de llegar a suecia fracasaría, por obvias razones sabemos que todo salió bien.

Estuve en Aguascalientes hasta el 20 de Agosto, fue una estadía muy cómoda y la recuerdo con mucha felicidad, después de mucho tiempo por fin pude pasar un lapso mayor de una semana con mi familia además de que concordó con las vacaciones de mi papá y mis hermanos, así que tuve mucho tiempo con ellos. Lo disfrute muchísimo. También la familia y los viejos amigos aportaron mucho a la estadía, fueron un sin fin de despedidas y abrazos, sin duda agradezco a todos y cada una de las personas que pude visitar y también a las que no se pudo por una u otra razón todos me hicieron sentir su aprecio y cariño.

El lunes 20 de Agosto salí con rumbo al DF con maletas preparadas en caso de ser admitido a Vaxjo, todavía no tenía la menor idea si iba o no pero yo ya estaba listo para lo que viniera. El fin de este viaje al DF era por la bienvenida/despedida que hicieron los amigos de Carlos Betancourt en Acapulco. Quedaron de reunirse el Miercoles 22 en la madrugada para partir rumbo al diamante del pacífico mexicano. Así fue como fui a parar a Acapulquito, buen lugar para una despedida de la madre patria. El viaje fue inolvidable y sensacional, pueden ver las fotos en el album, o directamente en este link http://picasaweb.google.com/fruvalcaba/ViajeAAcapulco

Estando en acapulco chequé mi correo electrónico el lunes 27 de agosto y me enteré que ya había sido admitido a Suecia, no podía creer que esto estaba pasando. Esa noche dormí reflexionando sobre el viaje. Comenté con Carlos lo sucedido y me reiteró su apoyo así que el día siguiente comenzamos a realizar todos los trámites, desde conseguir los boletos de avión hasta ver la papelería y requisitos necesarios para la visa de estudiante. Recabamos información desde Acapulco, llegamos el miercoles 29 a la ciudad de méxico y en 3 días arreglamos todo lo habido y por haber. Todo simplemente salió a la perfección.

El domingo 2 de septiembre fue uno de esos días raros en donde la emoción rebasa los sentidos y no sabes realmente donde estás situado, todo parece siempre igual y diferente. Estuve en el aeropuerto que tantas veces había estado y ya no lo reconocía en ciertos momentos, mi mente se encontraba en otro contiente mientras mi cuerpo seguía en la ciudad de méxico.

Ese domingo 2 de septiembre fue cuando dejé de estar aqui y comencé a estar allá.